¿Cuáles son las semillas que producen apendicitis?

Qué alimentos pueden causar apendicitis

El apéndice es un tubo fino que se une al intestino grueso. Se encuentra en la parte inferior derecha del vientre (abdomen). Cuando eres un niño pequeño, el apéndice es una parte activa de tu sistema inmunitario, que ayuda a tu cuerpo a combatir las enfermedades. Cuando eres mayor, el apéndice deja de hacerlo y otras partes de tu cuerpo siguen ayudando a combatir las infecciones.

El apéndice puede infectarse. Si no se trata, puede reventar (romperse). Esto puede ocurrir entre 48 y 72 horas después de los síntomas. Por ello, la apendicitis es una urgencia médica. Si tiene síntomas, acuda al médico de inmediato para evitar más infecciones, que pueden ser mortales.

La apendicitis se produce cuando el interior del apéndice está obstruido. La apendicitis puede estar causada por diversas infecciones, como virus, bacterias o parásitos, en su tracto digestivo. También puede ocurrir cuando el tubo que une el intestino grueso y el apéndice se bloquea o queda atrapado por las heces. A veces los tumores pueden causar apendicitis.

El apéndice se vuelve doloroso y se hincha. El suministro de sangre al apéndice se detiene a medida que la hinchazón y el dolor empeoran. Sin suficiente flujo sanguíneo, el apéndice empieza a morir. El apéndice puede reventar o desarrollar agujeros o desgarros en sus paredes, lo que permite que las heces, la mucosidad y la infección se filtren y entren en el vientre. El resultado puede ser una peritonitis, una infección grave.

¿Pueden las semillas de girasol causar apendicitis?

Entre los casos sometidos a apendicectomía, se examinaron retrospectivamente los casos de apendicitis que tenían semillas de frutas y residuos vegetales no digeridos en su etiología. También se utilizaron las características histopatológicas, la edad, el sexo y los parámetros de morbilidad y mortalidad.

Se encontró semilla de fruta en un caso (0,05%) con presencia de pus en la luz del apéndice, y residuos vegetales no digeridos en 7 casos (0,35%). Se determinó que había inflamación del apéndice en 2 de los casos de residuos vegetales, mientras que había obstrucción e hiperplasia linfoide en la luz del apéndice de 5 casos. No se observó ninguna mortalidad.

La proporción de apendicitis aguda causada por plantas es mínima entre todos los pacientes apendicectomizados, pero evitar la ingesta de semillas de frutas no digeridas y masticar bien las plantas puede ayudar a prevenir la apendicitis.

¿Qué causa la apendicitis en un niño?

El apéndice es un tubo fino que se une al intestino grueso. Se encuentra en la parte inferior derecha del vientre (abdomen). Cuando eres un niño pequeño, el apéndice es una parte activa de tu sistema inmunitario, que ayuda a tu cuerpo a combatir las enfermedades. Cuando eres mayor, el apéndice deja de hacerlo y otras partes de tu cuerpo siguen ayudando a combatir las infecciones.

El apéndice puede infectarse. Si no se trata, puede reventar (romperse). Esto puede ocurrir entre 48 y 72 horas después de los síntomas. Por ello, la apendicitis es una urgencia médica. Si tiene síntomas, acuda al médico de inmediato para evitar más infecciones, que pueden ser mortales.

La apendicitis se produce cuando el interior del apéndice está obstruido. La apendicitis puede estar causada por diversas infecciones, como virus, bacterias o parásitos, en su tracto digestivo. También puede ocurrir cuando el tubo que une el intestino grueso y el apéndice se bloquea o queda atrapado por las heces. A veces los tumores pueden causar apendicitis.

El apéndice se vuelve doloroso y se hincha. El suministro de sangre al apéndice se detiene a medida que la hinchazón y el dolor empeoran. Sin suficiente flujo sanguíneo, el apéndice empieza a morir. El apéndice puede reventar o desarrollar agujeros o desgarros en sus paredes, lo que permite que las heces, la mucosidad y la infección se filtren y entren en el vientre. El resultado puede ser una peritonitis, una infección grave.

Las semillas de tomate pueden causar apendicitis

Introducción: Las semillas pueden encontrarse en las muestras de tejido gastrointestinal, y su aspecto polifacético puede suponer un reto. El objetivo es informar de una incidencia aproximada de muestras de patología que presentan semillas, especificar los tipos de muestras más frecuentes y mostrar una iconografía de las semillas más comúnmente identificadas.

Resultados: Se recogieron 50 casos con semillas/partes de semillas completas: 16 resecciones colónicas por cáncer colorrectal y diverticulosis, 13 resecciones apendiculares por apendicitis, 1 resección gástrica. Se encontraron 15 casos en muestras de polipectomía y 5 casos en biopsias endoscópicas colorrectales. Los tipos de semillas más frecuentes fueron las de tomate, kiwi, arándano y mora.

Los especímenes de patología gastrointestinal constituyen una gran parte de la práctica diaria de cualquier consulta de patología de gran actividad, con especímenes que van desde pequeñas muestras de biopsia endoscópica hasta importantes resecciones quirúrgicas. En la mayoría de los casos, la materia alimenticia no es claramente visible, ya que la preparación intestinal limpia eficazmente el intestino antes de la endoscopia o las muestras quirúrgicas se lavan de heces después de la apertura. En raras ocasiones, en la microscopía, el patólogo encuentra material "extraño" en la luz intestinal que puede causar algunas dificultades de reconocimiento. En particular, la materia vegetal, como las semillas, puede resultar resistente a la digestión y encontrarse en la luz intestinal, donde su aspecto multifacético puede ser un reto para los histopatólogos, en lo que respecta al reconocimiento y al diagnóstico diferencial.